domingo, 6 de junio de 2010

FRAUDE DEL CANON MINERO

¿Sabe realmente cuanto de presupuesto nos corresponde por canon? ¿Cómo es la repartija del canon? ¿En que se invierte la plata del canon? ¿Todas las empresas mineras aportan al canon? Estas y otras preguntas de seguro que no podrían responder nuestros estúpidos, ignaros autoridades que vienen ahogando su gestión, en medio de la gran pobreza.

La crisis por el canon minero sucedido entre Moquegua y Tacna, solo llegó a ponerle una cortina más a los oscuros manejos del canon. La conclusión del problema no fue el acuerdo concertado para que ambas o todas las regiones se beneficien equitativamente con el canon, sino más bien para saber si el ministro del interior ó el comandante de la policía, fueron los culpables del moqueguazo. Es decir que todo un tema de interés nacional, fue opacado por acciones policíacas de menor interés para los pobres del Perú profundo.

La Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía, hace una explicación ponderada y engañosa de la distribución del Impuesto a la Renta, orientada al canon minero, en la que parecen exorbitantes las transferencias del famoso canon. Aprovechare explicar de manera más real esta distribución. Actualmente algunas empresas mineras contribuyen al fisco nacional el 30% de sus ganancias liquidas o utilidades netas por la explotación económica de los recursos mineros (Metálicos y no metálicos) el mismo que se consigan como Impuesto a la Renta (IR), de las cuales el 15%, es para los bolsillos del centralismo burocrático de la gran Lima y el otro 15%, se transfieren en forma efectiva a los gobiernos locales y Gobiernos regionales de todo el Perú, cuando debiera transferirse todo ese 30%, en forma descentralizada y según indicadores de pobreza; Sin embargo tenemos que pelearnos de este 15% para tener algo de canon para nuestras regiones, de las cuales el 1.5% es para los distritos de todo el Perú donde se explote la minería. El 3.75% es para el resto de distritos de las provincias donde se explota la mina. El otro 6% es para las provincias del departamento y finalmente el 3.75% es para los gobiernos regionales, del cual tiene que compartirse con las universidades públicas de su jurisdicción. En conclusión “Las empresas mineras transnacionales, se llevan el 70% de miles de millones de dólares. La burocracia capitalina de Lima el 15% y el otro 15% no las tiran a toda las regiones como hueso para perro cholo” haciendo que nos peleemos y nos matemos entre hermanas regiones, donde somos y necesitamos mas presupuesto para luchar contra la pobreza. Por ejemplo, Puno ocupa el onceavo lugar en recibir canon; es decir solo el 0.3% del IR minero es decir el 2% de canon minero.

Como verán, es irrisorio, injusto y fraudulento la distribución del canon minero, siendo el mas importante de los seis tipos de canon existentes (Minero, Petróleo, Gasífero, Hidroenergético, forestal y pesquero), por el enorme volumen de recursos que genera para el estado. Ahí la injusticia no acaba. Es mas bien la punta del “iceberg” que provoca estragos en la sociedad, economía y política del Perú; tales como los desacuerdos sobre el impuesto a las sobreganancias mineras, El incumplimiento del pago de regalías mineras por algunas empresas mineras transnacionales, La deducción y/o exoneraciones tributarias (impuesto a la renta e IGV) en desmedro del famoso canon minero para gobiernos locales, gobierno regionales y otros sectores del estado. A esto se suma el desfalco de fondos e incapacidad de gasto por parte de las autoridades locales y regionales. Por ello el pueblo exclama la apertura de un espacio de participación, renegociación y revisión de los contratos con las empresas mineras transnacionales, para que los beneficios sean más justas y favorables entre: Estado – Sociedad y Empresa. La minería enriquece a pocos y empobrece a muchos. Otra minería es posible.

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